Hay días en los que una necesita un subidón de felicidad, rápido e indoloro. Para ello existe una receta infalible escondida en algunos bares de Hamburgo, su nombre es St. Pauli Killer. Es un cóctel para hombres, o eso dicen los germanos, ya que lleva 4 clases de ron, pero nosotras también tenemos derecho y la verdad es que... nos encanta.
A los 10 minutos de tenerlo en la mesa ya comienza la sonrisa ebria, la risa floja, el olvido de los problemas diarios… gloria bendita. A propósito, la descubridora de esta joya no fue otra que Gloria, que tuvo la genial idea de pedirlo con su, un rato después, muy achispada madre en el bar Meyer Lansky’s, en Gänsemarkt.
En realidad, el alcohol no se nota en el sabor, debido a que contiene bastante zumo, pero sube que da gusto. Aquí la receta, para los que queráis vivir la experiencia:
2 cl Brandy de Albaricoque (Apricot Brandy)- 2 cl de licor de grosella negra (Cassis)
- 2 cl de Pampero blanco
- 2 cl de Pampero añejo
- 2 cl de Bacardi 8 años
- 2 cl Havana Club 3 años
- 2cl granadina
- 2cl zumo de limón
- 2 cl zumo de maracuyá
Decoración:
- Maracuyá
- 2cl ron de 73° (Old Pascas)
Se pone hielo en un vaso tambor (como el de caipirinha), se vierten los ingredientes siguiendo el orden para que se quede el fondo rojo (del brandy y el cassis), se pone una mitad de maracuyá dentro del vaso a modo de “piscina” y se vierte el ron de 73° en la fruta. Cuando se sirve, se prende fuego al ron. Pero ojo! no se debe esperar mucho para apagarlo, que sino se le va el efecto felicidad absoluta ;).
He estado investigando sobre el origen de este cóctel, y aunque no es información segura, sí que existió un asesino a sueldo en St. Pauli, el auténtico St. Pauli Killer, que allá por los 80 escandalizó al país por matar por encargo a 5 joyas de personas que tenían burdeles, casas de juegos ilegales o se dedicaban al negocio lucrativo de traficar con drogas en el barrio rojo de Hamburgo. El buen samaritano se llamaba Werner Pinzer y terminó sus días en 1986 cuando durante un interrogatorio mató al fiscal que lo interrogaba, a su propia mujer y se suicidó. Este asesinato es conocido como el caso más espectacular de la historia criminal de Alemania.
Aquí os dejamos un par de direcciones para disfrutarlo:
- Meyer Lansky’s, en Gänsemarkt 36: Yo le doy un 10, además de 16:00 a 20:00 tienen Happy Hour, lo que quiere decir, que podemos disfrutar del cocktail por menos de 6,00€, en verano, salir de trabajar y tomar algo en su terraza no tiene precio. En invierno hay que armarse de valor, o una mascarilla para respirar, pues se puede fumar dentro...
- 20 up, en la planta 20 del hotel Empire Riverside, Bernhard-Nocht-Straße 97: Me encanta que en la carta, nuestro cóctel se encuentre en la sección de “medicina fuerte”, aunque sólo le puedo dar un 8 (y 2 puntos de esos son por las vistas impresionantes que ofrece el bar al atardecer). El precio, 13,50, lamentablemente no tienen Happy Hour ;).
Menos mal que ahora nuestro asesino favorito sólo mata los problemas y que Herr Pinzer pasó a mejor vida... Nosotras seguiremos buscándolo en las cartas de los bares de Hamburgo.
Eva
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